Realizan en Obregón el Foro Internacional de Diversificación Productiva

Autoridades buscan impulsar una nueva “revolución verde” con cultivos resistentes a la sequía.

 

Ciudad Obregón/VdM, 29 de agosto

 

 

Ciudad Obregón fue sede del Primer Foro Internacional de Diversificación Productiva, considerado el inicio de una nueva revolución verde para el campo sonorense.

En este espacio participaron productores, investigadores, docentes y más de mil 500 estudiantes de universidades como Itson, Itesca, Itvay, Unison, UES campus Cajeme, Etchojoa y Benito Juárez, así como de la Universidad Tecnológica de Etchojoa, quienes representan a la nueva generación que impulsará la transformación agrícola de Sonora con innovación y sustentabilidad.

Las oleaginosas como: soya, canola, girasol y cártamo, además del nopal, se posicionan como cultivos estratégicos por su resistencia a la sequía, su eficiencia en el uso del agua y su papel en la rotación productiva.

Actualmente, se han destinado 10 millones de pesos para el impulso del cártamo y está abierta la convocatoria para productores de trigo reconvertidos a cártamo y cebada.

Durante el foro se impartieron conferencias sobre agricultura en zonas áridas, sistemas agroalimentarios sostenibles, nuevas tecnologías y experiencias de cultivos alternativos.

Participaron especialistas nacionales e internacionales como: Amadeo Ibarra, Enrique Troyo, Simon Fonteyne, Santiago de Jesús y Mariano Gómez, así como representantes de la Sader, Conagua y autoridades municipales de Cajeme.

Revolución Verde

La secretaria de Agricultura, Ganadería, Recursos Hidráulicos, Pesca y Acuacultura (Sagarhpa), Celida López Cárdenas, recordó que entre las décadas de 1950 y 1970 Sonora fue llamado “el Granero de México” y que en el Valle del Yaqui nació la Revolución Verde con las investigaciones de Norman Borlaug, quien recibió el Premio Nobel de la Paz en 1970 por desarrollar variedades de trigo que dieron esperanza al mundo.

La diversificación, dijo, permitió a Sonora integrarse a los mercados globales con cultivos como hortalizas, uva, naranja y melón, alcanzando producciones de hasta cuatro millones de toneladas en décadas pasadas. “Hoy lo verdaderamente revolucionario es reconvertir cultivos y adaptarse a la realidad hídrica que enfrentamos”, señaló.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *